martes, 9 de septiembre de 2008

¿RELACIONES PREMATRIMONIALES?


Hola Lizeth (espero no te moleste te llame por tu nombre), me llamo José, tengo 26 años
El problema que tengo, es que de un tiempo a esta parte (hace unos meses) caigo en tentaciones con mi novia, ambos queremos llegar puros al matrimonio (en el caso que lleguemos a casarnos claro), pero muchas veces cedemos ante la tentación y la lujuria, no hemos tenido relaciones, pero si hemos estado muy cerca.
He tomado varias medidas, nunca me ha gustado alimentar la lujuria, así que trato de no ver siquiera películas muy provocativas (es muy difícil, en el mundo de ahora casi todo tiene lujuria inmersa, la música, la televisión, periódicos, etc), me impongo yo mismo castigos cuando caigo, trato de llevar una vida de mas oración, y hemos mejorado algo, pero muy poco, parece que al primer descuido volvemos a caer, y pues me siento re-mal por no poder superar esta etapa y defraudar tanto a Dios con mis actos y al mismo tiempo siento algo de miedo de los efectos negativos que pueda producir mis actos.
Te pido tu consejo, gracias por la ayuda que prestas.

Estimado José:La sexualidad es una faceta importante y fundamental de nuestras vidas, claro que en lo que nos diferenciamos de los animales es en que nuestra sexualidad va ligada a la afectividad.Yo no sé si lo que pasa con tu novia, son tentaciones y lujuria, o más bien una etapa normal dentro del enamoramiento. Anora las reglas que se han puesto, tendrán que revisarlas por que al parecer va contra lo que sienten el uno por el otro; claro que no deben olvidar el tema de la responsabilidad y compromiso con ustedes y con sus principios morales.

También sería bueno pensar en el tema de la sublimación, que les va ayudar a descargar energía en otro tipo de actividades.

Más que defraudar a Dios, lo que debe preocuparte es no defraudar a tu pareja ni a ti mismo.

Conversa mucho con ella sobre lo que quieren y hasta donde están dispuestos a llegar, seguramente esto les ayudará tener ideas más claras y compromisos más sostenibles. Mucha suerte, hasta pronto Psicóloga Lizeth

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